*Después de dejar un surco entre casa y ferretería, el mueble de cocina tiene tiradores... casi. Falta una manija, andá a saber qué pasó con ella. Quizás nunca fue comprada.
*Marido cambió uno de los codos de la pileta de cocina... igual pierde. Diagnóstico: está tapada, hay que desarmar todo y limpiar.
*El sábado vino Maikel y arregló un par de cositas pendientes. Vuelve el sábado que viene, compraré bondiola.
*Y, last but not least, pusimos la luz bajo alacena, indispensable para no seccionarse un dedo mientras nos hacemos sombra con el propio cuerpo sobre la tabla de picar.
Bastante bien para un fin de semana ocupado.
11 comentarios:
Volvió Maikel!?
O ya estaba viniendo y no contaste nada?!?!
Ni lo uno ni lo otro, vino sólo por el día a ver un par de boludeces.
¡bravo por la luz debajo de la alacena!
tu cocina es "hola soy una cocina pequeña y encantadora, aunque me falten un par de manijas, ¿a quién no?"
no al seccionamiento de dedos en la receta
quiero foto de maikel y la bondiola! (ayyyy sonó mal????)
Marie, qué luz pongo en el bajo alacena? Necesito.
INDISPENSABLE la luz bajo la alacena.
Loli, si o si fluorescente blanca cálida, tiene que ser MUCHA LUZ y tiene que respetar los colores de los alimentos, no van lámparas que amarilleen.
Hay artefactos extrachatos que ya vienen con todo armado e incluido; si tenés una cenefa que los oculte, mejor, pero si no tenés... es más importante no cortarse los dedos que cualquier consideración estética.
amo esa luz, yo tambien me hago sombra.
esa pileta esta endemoniada.
Encantadora cocina, cuando fui no me asome a espiar... tengo que practicar un poco más el sentido de la curiosidad!
En lo de Marie hay que espiar todo, de todo se aprende.
Oh, no! Acabo de darme cuenta de que estoy hecha una lectora cholula boluda, una bolula!, de ésas que te dejan un elogio tras otro en el blog. En qué momento me convertí en este ser despreciable?
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