Hace tiempo que vengo con un objetivo en mente: bajar los 25 min para la distancia de 5 km. Desde la Media Maratón que estoy entrenando para eso.
Para un corredor de verdad, esa velocidad de 5 minutos por kilómetro es un chiste patético pero a mi se me venía escapando.
Hoy fui a correr una carrera, la McDonalds 5k, con muchas amigas y la mente puesta en clavarle el puñal a los 25 minutos de una puta vez.
Primer kilómetro, 5:06, no está mal, la largada era un poco complicada, ya recuperamos en el próximo.
Segundo kilómetro, 10:48, eh, no, no puede ser, no bajé nada la velocidad, está mal marcado, la puta que lo parió al Big Mac y no, no quiero agrandar mi combo.
Acá tengo que hacer la aclaración de que no es que yo esté totalmente loca y obsesionada, es que para llevar un ritmo parejo, hay que pasar cada cartel de km en un tiempo determinando, cuando hay uno mal puesto ya es muy complicado ordenarse nuevamente.
Tercer kilómetro, veníamos con el acumulado mal del anterior, no sé bien en cuánto lo pasé, si sé que estaba Ronald McDonald alentando y casi lo emboco de la furia que traía.
Cuarto kilómetro, me empiezo a serenar, a reconocer que dentro de todo venía bien, probablemente dentro de las 50 primeras, no hay que tomarse las cosas así, más bien me concentro en pasar a todas las que pueda.
Quinto y último kilómetro, no sé con qué tiempo llego, me pasé de los 25 o no, le doy con todo, paso a una en los 10 metros finales, llegó en 25:35, enojada, paso al lado de los conductores del evento, por poco no la escupo a Chechu Bonelli, pobre, ¿qué culpa tenía ella?
Con el tiempo, me doy cuenta de que la carrera estaba larga, van llegando amigos que me dicen que había 5.23 km ó 5.21 ó 5.17, así que como sea estoy ya abajo de los 25.
Alegría, felicidad, tremendo picnic, risas, fotos.
Todo muy lindo pero después de la Galicia y de ésta, si no está certificada la carrera, no voy más.
O capaz hago un 5000m en pista, quién sabe.
(Obvio, esta carrera ya saben por quién va. Incluso conozco a dos desaforadas que largaron haciendo la V. Amigas mías tenían que ser)